Cierra los ojos y dime qué oyes...¿nada? MENTIRA, oyes tu reloj interior, tu reloj biológico, ese que te avisa de cuándo estás preparado/a para hacer determinadas cosas, ese reloj que no se para ni un solo día de tu vida, excepto cuando es tarde...
Si no queremos que nuestro reloj se pare debemos hacerle caso, da igual que sea la tontería más grande del mundo, eso es lo de menos, si tu reloj te dice que ha llegado la hora de hacerlo, hazlo!
Si hemos quedado con los amigos y miramos el reloj, sabemos a qué hora debemos salir para no llegar tarde, esto es igual, si prestamos un poco de antención a nuestro interior nos daremos cuenta de que hay cosas que deberíamos haber hecho hace tiempo. Nunca el tiempo es perdido, nunca es tarde para hacer algo, pero luego vienen las prisas, las consecuencias de esas prisas, los cambios en tí mismo. Las prisas, el crecer muy deprisa está genial para un día, dos, no más. Cada cosa a su tiempo, para ello mirar vuestro reloj interno que sirve de ayuda :D
oh me ha llegado este texto y que GRAN razón llevas. tu eres amiga de Bea (la rubia xD) no?
ResponderEliminarun besito y muchas gracias : )
por desgracia si jaja, no hombre : )
ResponderEliminarun besito !
¿el reloj te puede pedir tarta de queso? xDDD a mi algunas mañanas, cuando tardo en comer, me salta una alarma en plan, gjgjgjgjgj dentro de mi...
ResponderEliminar¿será el reloj? :O =P
Un beso, ¿cómo supiste de mi blog? oO ^^
Qué razón tienes con este texto..
ResponderEliminarme gusta mucho como escribes! :)
te sigo x)
Un beso!